Para muchos, celebrar San Valentín ha dejado de tener el brillo de otros tiempos. Sin embargo, muy pocos se resisten a hacer algo especial en este señalado día. El día de los enamorados es una excusa perfecta para romper con la rutina del día a día, tener un detalle con la persona amada y reafirmarnos una vez más en lo mucho que queremos a nuestra pareja. Una joya cargada de significado siempre es una gran opción como regalo de San Valentín.
Cuando pensamos en cómo celebrarlo, cada 14 de febrero nos planteamos lo mismo: “o salimos a cenar al restaurante de siempre o nos olvidamos de que este día existe”. Pero los románticos empedernidos siempre esperan algo más, una sorpresa inesperada, algo que compartir y poder recordar siempre. Si todavía no has planeado nada y no sabes qué hacer no te preocupes, te ofrecemos cinco propuestas para pasar un día inolvidable planteándote un maridaje entre planes y joyas para un San Valentín perfecto.
1. Una pulsera de diseño para una escapada cultural
La cuestión este año es proponerse un cambio en el modo de celebrar este día, y una escapada para visitar una exposición de arte con tu pareja puede ser una buena opción. El Museo Guggenheim de Bilbao siempre ofrece grandes propuestas y la ciudad es igualmente atractiva como destino. Todavía llegáis a visitar la fantástica exposición de David Hockney en torno al retrato.
El magnetismo de las líneas del edificio de Frank Gehry en Bilbao nos trae a la mente joyas con líneas urbanas y minimalistas, como este atractivo brazalete en plata negra de sensuales contornos, ideal para amantes del diseño.
2. Un anillo exclusivo para una cena gourmet en casa
Para paladares exquisitos y con ciertas habilidades en la cocina, un plan perfecto es la realización de una cena gourmet en pareja sin salir de casa. Toda una experiencia para amantes de lo exquisito desde el idearla, proveerse de los ingredientes más exclusivos, cocinarlo al más puro estilo Masterchef y finalmente degustarlo juntos.
Ese atractivo por la experiencia gourmet más exquisita marida perfectamente con el gusto por las joyas únicas de diseño exclusivo con las que seguro sorprendes a tu pareja. Como propuesta, un anillo cocktail de formas singulares y volumen único que lo hace diferente a cualquier otro.
3. Unos pendientes de rubís para una cata de vinos
Una cata de vinos o una velada de maridajes siempre es una experiencia inolvidable para los sentidos, y puede serlo aún más si esas sensaciones las vives junto a tu pareja. Tanto si compartís una cata guiada en alguna tienda especializada o restaurante, como si el plan se traslada a alguna bodega en el Somontano o la Rioja Alavesa la experiencia aportará un extra de sensaciones para romper la monotonía.
El rubí es una piedra preciosa cuyo bello color rojizo se usa habitualmente para referenciar las tonalidades de algunos vinos tintos. Esta gema favorece enormemente y si se une al brillo de los diamantes como en estos pendientes de oro blanco y rubíes el éxito está asegurado.
4. Un anillo de diamantes para una jornada de esquí
Para los que tienen espíritu deportivo, nada mejor que un San Valentín en la nieve y disfrutar en pareja de la naturaleza, el ejercicio físico y los atractivos del après ski. Tanto si la escapada se limita a una jornada, si la distancia lo permite, como si se convierte en más larga el plan es ideal para pasarlo en buena compañía.
Nada mejor que un anillo de diamantes en medio de la montaña al más puro estilo de la pedida de mano de Paris Hilton, para sellar el amor bajo cero. En este caso un anillo de oro blanco y brillantes con el que seguro acertarás.
5. Unos pendientes originales para un concierto de rock
El día de los enamorados no tiene por qué celebrarse siempre del modo romántico más convencional. A quién no le gusta saltar y bailar en el concierto de pop o rock de su grupo favorito. Sorprende a tu pareja con un par de entradas y la diversión estará garantizada.
Nada mejor que unos pendientes jóvenes, originales y con movimiento infinito para asistir al concierto. En este caso estos pendientes de cadenas infinitas acompañarán el movimiento más divertido de la noche de San Valentín.
Visto lo visto siempre hay planes y joyas para un San Valentín perfecto. Y tú, ¿sabes ya qué joya vas a regalar a esa persona especial el día de los enamorados?