1845 marca el comienzo de la historia de la relojería en Glashütte, una ciudad en las montañas en la región alemana de Sajonia que durante años estuvo caracterizada por la extracción de plata y que hoy en día es el epicentro de la fabricación de relojes alemanes de alta calidad. Los pioneros Ferdinand Adolph Lange, Julius Assmann, Moritz Grossmann y Adolf Schneider desarrollaron aquí su pasión, conocimiento y habilidades empresariales trabajando para hacer realidad su visión de crear una industria relojera independiente en esta región alemana.
Con espíritu emprendedor y dedicación, estos maestros de la relojería sentaron las bases para un futuro en el que el nombre Glashütte llegara a ser reconocido y ganara fama internacional. El nombre Glashütte no se refiere simplemente a una localidad, se trata de una identidad y una marca de calidad al mismo tiempo. Las características de Glashütte siempre han sido la expresión de la perfección artesanal y la innovación técnica, así como la búsqueda de una belleza atemporal.
Desde la reunificación alemana, Glashütte se ha convertido de nuevo en sinónimo de relojería de lujo de la más alta calidad, precisión y belleza. Como ya sucedía hace más de 165 años, marcas de relojería tan reconocidas como Glashütte Original, A. Lange & Söhne o Bruno Söhnle fabrican hoy relojes de precisión en esta localidad. Sólo aquellos relojes alemanes de alta calidad que hayan sido fabricados íntegramente en la ciudad o cuyo valor añadido diferenciador se haya generado allí pueden ser identificados con la denominación de origen “Glashütte”.
Varios centros educativos, entre ellos la Escuela de Relojería Alfred Helwig de Glashütte Original o el Museo de Relojería Alemana de Glashütte, aseguran que el arte de la relojería se transmita a las siguientes generaciones. Como resultado, hoy en día Glashütte sigue siendo un símbolo de excelencia en el arte de la relojería alemana.
Sólo 9 grandes firmas fabrican relojes hoy en día en Glashütte, entre ellas Bruno Söhnle, fabricante de relojes alemanes de alta calidad con la que Barney Barnato completa su selección de relojería. Los relojes Bruno Söhnle se fabrican en la famosa región alemana de Glashütte, estableciendo sus estándares de producción y criterios de precisión con los mismos parámetros que Lange & Söhne, Glashütte Original o Mühle-Glashütte. La marca Bruno Söhnle es sinónimo de la fascinación por la relojería tradicional con componentes modernos, constante investigación tecnológica, diseños elegantes y atractivos, y a precios asequibles.
Bruno Söhnle Idas
Bruno Söhnle Pesaro
Bruno Söhnle Lago
El nombre Bruno Söhnle se ha asociado con la relojería tradicional desde hace más de 50 años. Durante todo este tiempo se ha convertido en sinónimo de relojes alemanes de alta calidad para hombres y mujeres con una gran variedad de estilos y precios. Tanto si se prefieren relojes mecánicos como de cuarzo, sencillos o con complicaciones, hay un modelo para cada persona. Dado que los relojes Bruno Söhnle tienen una excelente relación calidad-precio, una alta calidad y un diseño muy atractivo, siempre se encuentra un reloj adecuado para cada momento.
Bruno Söhnle Grandioso
Bruno Söhnle Devi
Bruno Söhnle Stuttgart
¡Espectaculares!
Voy preparando mi carta a los Reyes…
¡Adelante! Tenemos linea directa con sus majestades… Muchas gracias Roberto